Un nuevo estudio realizado por investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de Carolina del Norte (UNC), en Estados Unidos, basados en imágenes por resonancia magnética del cerebro de 152 bebés, encontró alteraciones en la conectividad funcional dentro
de la parte de la red de la amígdala prefrontal, una vía que se cree
que desempeñan un papel importante en la regulación de la excitación, vinculadas con la exposición en el útero a la cocaína.
«Hasta donde sabemos, este estudio es el primero en mostrar que el uso materno de drogas durante el embarazo altera la organización funcional del cerebro en los recién nacidos», afirma uno de los autores de la investigación, Wei Gao, profesor asistente de Radiología en la Universidad de Carolina del Norte.
«Este estudio puede informar de nuevas estrategias dirigidas a identificar los riesgos y la intervención temprana», añade Karen M. Grewen,
profesora de Psiquiatría, Neurobiología y Psicología y otra autora del
trabajo, cuyas conclusiones se revelan en un artículo que se publica
este miércoles en la revista «Journal of Neuroscience».
En el estudio, se realizaron imágenes de resonancia magnética funcional (rsfMRI) de 152 niños en estado de reposo.
De ellos, 45 habían sido expuestos a la cocaína durante su etapa
prenatal, 43 tenían exposición prenatal a drogas distintas cocaína y 64
no habían sido expuestos a ninguna droga durante la gestación.
Se hallaron alteraciones en la organización funcional del cerebro en los bebés
de los grupos que habían sido expuestos a las drogas. El grupo con
exposición prenatal a la cocaína presentaba alteraciones adicionales que
el otro grupo expuesto a otras drogas no tenía.
Agitación de los bebés
Se encontró una anti-correlación reducida entre la amígdala
y la parte de la corteza prefrontal que se asocia específicamente con
la exposición prenatal a la cocaína, lo que puede indicar un fallo
potencial o riesgo de fallo en la supresión de las respuestas de la
amígdala de la corterza prefrontal de orden superior. La interrupción de
este circuito funcional puede potencialmente ser la base de la
característica desregulación de la agitación observada frecuentemente en niños con exposición prenatal a la cocaína.
En general, este estudio reveló que rsfMRI en bebés puede
jugar un papel fundamental en la búsqueda de biomarcadores para
identificar riesgos y orientar la intervención temprana para mejorar los
resultados de comportamiento posteriores.
Fuente: ABC
0 comentaris:
Publicar un comentario
No serán publicados aquellos comentarios que resulten ofensivos.